Gingivitis y periodontitis son tipos de afecciones de las llamadas enfermedades periodontales. La primera de ellas, la gingivitis, es una afección bastante común entre la población. Por su parte, la periodontitis es una enfermedad de cierta gravedad, que también es relativamente frecuente en el campo de la odontología. Hablamos de cada una de ellas, sus causas, su tratamiento y en qué se diferencian gingivitis y periodontitis.

¿Cuáles son las diferencias entre la gingivitis y la periodontitis?

Las causas que provocan una y otra afección son las mismas: estrés, diabetes, embarazos, tabaco, alcohol, mala distribución de los dientes o una higiene bucal deficiente, entre otras. La diferencia de gingivitis y periodontitis radica en que la gingivitis es una enfermedad muy común que, de no tratarse a tiempo, pasa a un estadio posterior más grave. Es decir, el paciente pasa a padecer de periodontitis.
La gingivitis o encías inflamadas es una enfermedad de origen bacteriano que afecta al tejido blando que soporta las piezas dentales. La acumulación de las bacterias produce una infección en la superficie de los dientes y en los espacios interdentales. Las encías enrojecidas e inflamadas, así como el sangrado de estas, son indicios de padecer esta afección. Existen tratamientos eficientes que consiguen que la afección termine remitiendo.
Si la gingivitis no se trata, la infección progresa hasta llegar a atacar al hueso del diente, lo que provoca la movilidad de las piezas dentales e incluso la pérdida de estas. Esa evolución de la gingivitis a una fase irreversible es lo que se conoce por periodontitis o piorrea.

Tratamiento de la gingivitis y periodontitis

El mejor tratamiento siempre es la prevención. Por eso, lo más aconsejable es acudir al dentista al menos una o dos veces por año para una revisión periódica. Además, adoptar medidas profilácticas facilitará el mantener una higiene bucal favorable. Mantén tu boca libre de infecciones con el cepillado después de cada comida y utilizando complementos como el hilo dental y cepillos interproximales que eviten la acumulación de residuos en el espacio interdental.
Otra de las diferencias de gingivitis y periodontitis, es que la gingivitis suele remitir con la limpieza profesional por parte de un odontólogo para eliminar el sarro y adquiriendo estos hábitos de higiene dental exhaustiva. Si el dentista lo cree conveniente puede recetarnos colutorios con clorhexidina, que son antisépticos. Cuando se produce la periodontitis, entramos en una fase irreversible; no se puede curar, pero sí frenar su avance. El tratamiento consiste en una limpieza de las bolsas periodontales, previo estudio del odontólogo para evaluar el estado de la enfermedad. En ocasiones, es necesaria una pequeña intervención quirúrgica para obtener un acceso óptimo de cara a limpiar bien las bolsas periodontales.

Como ves, aunque tengan diferencias, gingivitis y periodontitis tienen tratamiento. En Dentalkiub te ayudamos dándote las pautas para una correcta higiene bucal. Al menor indicio de sangrado o molestias en las encías, ¡consúltanos!