Smiley piercing, piercing smile o piercing sonriente… lo habrás leído y escuchado de distintas formas, pero, en definitiva, se trata de un piercing fabricado en acero quirúrgico que se coloca en el frenillo superior (el del labio superior). Una de las tendencias de los últimos años en el mundo de las perforaciones estéticas. Si estás barajando la posibilidad de hacerte un smiley piercing, adelante, pero, antes deberías tener en cuenta algunas consideraciones. Te explicamos cómo hacerlo para prevenir posibles riesgos que puedan surgir.
Según un informe de la Clínica Odontológica de la Universidad Rey Juan Carlos, más del 70% de pacientes con piercing en la boca presentan algún tipo de anomalía. Algunas de estas complicaciones son: sangrado, infecciones, alergias, dolor, inflamación o dificultad para masticar (incluso, para hablar).
Piercing en el frenillo o smiley piercing
El smiley piercing es un elemento, generalmente de metal y de carácter estético, que tiene como finalidad “decorar la sonrisa”. De hecho, se llama así porque únicamente es visible al sonreír. Una tendencia estética dental relativamente frecuente en jóvenes que buscan cambiar su aspecto radicalmente.
Pero, como decimos, las perforaciones en cualquier zona bucal pueden acarrear complicaciones si no se hacen correctamente. Además, hay que tener muy presente los cuidados necesarios posteriores a su colocación para evitar infecciones y otros riesgos (no dejan de ser implantes dentales). En los casos más graves, el constante roce del piercing con la encía ha hecho que el paciente sufra un desgaste de los tejidos blandos que soportan el diente y han terminado perdiéndolo.
Nuestra recomendación, si estás decidido a hacerlo, es que acudas a un estudio de piercing de referencia y que cumpla con todas las garantías sanitarias. Hay estudios muy serios y profesionales donde realizarán un estudio previo para comprobar que realmente puede llevarse a cabo la perforación. En caso de no ser posible, te aconsejarán hacerlo en otra parte del cuerpo.
Los smiley piercing son habituales en personas rebeldes que quieren expresar sus emociones con la expresión facial.
Consejos para el cuidado posterior:
- Limpia la perforación con agua y jabón y sécala bien antes de aplicar cualquier tipo de crema para la higiene bucal en el lugar de la perforación
- Manten limpio el smiley piercing lavándolo dos veces al día con agua y jabón
- Evita tocar el área perforada tanto como sea posible
- Enjuágate la boca después de comer, beber o fumar
Ahora sí podrás disfrutar de manera segura de tu «carita sonriente».
Si tienes un smiley piercing e identificas alguno de los riesgos que hemos descrito, contacta con nosotros sin dudarlo ¡Te atenderemos encantados!
Comentarios recientes