Ortodoncia visible o brackets convencionales
La ortodoncia convencional es uno de los tratamientos odontológicos más comunes y exitosos para corregir problemas de maloclusión y lograr una alineación dental óptima. Durante años se ha conseguido gracias a esta técnica enderezar las piezas dentales de los pacientes hasta lograr una boca sana y una sonrisa estética. El buque insignia de este tratamiento son los conocidos brackets metálicos. ¡Veamos cuáles son las ventajas del uso de la ortodoncia convencional!
Además de corregir la incorrecta distribución de los dientes y evitar patologías más severas, la ortodoncia tradicional tiene una función estética: lograr una sonrisa más simétrica. Para ello, la aparatología convencional se ayuda de los brackets.
Ventajas de la ortodoncia convencional
Los brackets pueden ser metálicos o autoligables. Los primeros son los brackets tradicionales, unas piezas de metal que se colocan en la parte anterior de los dientes. Consta, además, de dos elementos fundamentales para su función el arco y la ligadura. El arco va aplicando presión sobre los dientes gracias a las ligaduras. Mientras que estas unen brackets y arco. Por su parte, los brackets autoligables cumplen la misma función, pero sin necesidad de elementos añadidos como gomas o ligaduras.
Si bien es cierto que hoy en día existen tratamientos más innovadores y estéticos de aparatología dental, la ortodoncia convencional cuenta con importantes ventajas.
Garantía de éxito
Ya son muchos los años que se lleva aplicando este sistema en pacientes con algún tipo de maloclusión y los resultados son mayoritariamente excelentes. Es, por tanto, un tipo de ortodoncia que garantiza la solución a problemas estéticos y patologías bucodentales importantes.
Resistencia
Los brackets metálicos son mucho más resistentes que otras técnicas en las que se emplea porcelana, plástico u otros materiales que se rompen más fácilmente. Un tratamiento de ortodoncia puede durar, dependiendo del caso, de 6 a 24 meses, por lo que la durabilidad del aparato es algo fundamental.
Calidad-precio
Es un tratamiento más económico que otros que han surgido en los últimos años, como los que emplean técnicas de ortodoncia invisible. Menos estético, pero a cambio, garante de buenos resultados, por lo que su relación calidad-precio es inmejorable.
Ventajas de la ortodoncia convencional
Los brackets pueden ser metálicos o autoligables. Los primeros son los brackets tradicionales, unas piezas de metal que se colocan en la parte anterior de los dientes. Consta, además, de dos elementos fundamentales para su función el arco y la ligadura. El arco va aplicando presión sobre los dientes gracias a las ligaduras. Mientras que estas unen brackets y arco. Por su parte, los brackets autoligables cumplen la misma función, pero sin necesidad de elementos añadidos como gomas o ligaduras.
Si bien es cierto que hoy en día existen tratamientos más innovadores y estéticos de aparatología dental, la ortodoncia convencional cuenta con importantes ventajas.
Garantía de éxito
Ya son muchos los años que se lleva aplicando este sistema en pacientes con algún tipo de maloclusión y los resultados son mayoritariamente excelentes. Es, por tanto, un tipo de ortodoncia que garantiza la solución a problemas estéticos y patologías bucodentales importantes.
Resistencia
Los brackets metálicos son mucho más resistentes que otras técnicas en las que se emplea porcelana, plástico u otros materiales que se rompen más fácilmente. Un tratamiento de ortodoncia puede durar, dependiendo del caso, de 6 a 24 meses, por lo que la durabilidad del aparato es algo fundamental.
Calidad-precio
Es un tratamiento más económico que otros que han surgido en los últimos años, como los que emplean técnicas de ortodoncia invisible. Menos estético, pero a cambio, garante de buenos resultados, por lo que su relación calidad-precio es inmejorable.
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